Concentración factor importante a la hora de estudiar

Cuando y como castigar

El castigo es probablemente una de las situaciones mas complejas que se presentan a diario a todos los padres. Es importante comprender que el castigo no es la única forma y no debe ser la única forma de instruir a un niño sobre la forma adecuada de comportarse.
La enseñanza del comportamiento para un niño es fundamental para el futuro del niño. El "rayado de cancha" es lo que le indica al niño cual es el comportamiento adecuado y/o socialmente aceptado. Este conocimiento solo lo puede obtener si es que se le muestra o indica al niño que el comportamiento que llevo a cabo es o no adecuado.
Típicamente el ser humano aprende por la negativa. De hecho, la primera palabra entendida por el lactante es "no". Resulta mas "fácil" corregir un error que premiar un comportamiento correcto. Al momento de "formar" un niño es importante que exista un equilibrio entre los premios y los castigos.
Al momento de castigar es fundamental entender que el castigo para el niño no es solo castigo. También es una muestra de amor y de preocupación. Parece difí­cil entender y creer pero una gran mayoría de niños entrevistados agradecen las reglas impuestas por los padres.
El castigo debe ser en directa relación con la falta cometida. O sea falta pequeña dará como resultado castigo pequeño y falta grande dará como resultado castigo grande. Parece evidente, pero frecuentemente los adultos nos exaltamos porque los errores tienden a repetirse y sobre todo porque como seres humanos también evaluamos la falta en función de la repercusión emocional que tiene en nosotros.
Se consideran castigos adecuados aquellos que limitan la "libertad" del niño, aquellos que limitan el acceso a una comodidad no básica (juegos varios en computadores por ejemplo), o aquellos que reparan la falta cometida. Esto es considerando que el niño tenga la edad para poder entender la limitación de libertad o la reparación de la falta cometida. Hasta los 3 años en promedio es difí­cil alcanzar esta comprensión y deberemos acudir a otro tipo de castigo frecuentemente asociado con demostrar que algo esta mal. Un "NO" potente y seguro o un leve golpe en la mano serán lo más adecuado.
El golpe, o la corrección fí­sica, no sirve como castigo en si. Tiene la virtud de cortar un episodio de rabieta en ciertas y limitadas circunstancias, pero sobre todo tiene la desventaja que una vez "corregido" el niño el castigo ya acabo. No es un castigo que requiera de un sacrificio ni de una reflexión por parte del niño. Veamos ahora cuales son los típicos "errores" a no cometer al momento de castigar un niño.
1) El golpe o corrección física, principalmente, del punto de vista psicológico, porque no aporta ningún tipo de avance o progreso en el proceso de aprendizaje. Puede más que beneficios atraer desventajas como puede ser un niño retraí­do, tí­mido, con poca iniciativa o con depresión.
2) El castigo debe ser constante. O mas bien las reglas que indican cuando castigar, deben ser constantes. O sea, si en una ocasión castigo por saltar en la cama, debo hacerlo siempre. No es benéfico la inconstancia, más bien atrae más problemas de los que soluciona. El niño se siente confundido, no conoce cuales son las reglas de comportamiento. Este es un problema frecuente en parejas separadas, parejas quienes no están de acuerdo sobre cuando y como castigar pero también en parejas descalificadoras.
3) Nunca enviar al niño a su cama como castigo. El niño asociara la cama como un lugar negativo y presentara problemas al momento de acostarse para dormir. Como sabe el que en la noche es para dormir y las otras veces es por castigo? Hay que ser consecuente y lógico.

Como castigo?

Como castigar a un niño quien ha cometido una falta? Como presentado anteriormente son básicamente tres. La primera es limitar la "libertad" del niño. Se considera que para cada año de vida del niño se le obliga a quedarse por ejemplo en una silla sin hacer nada durante la cantidad de minutos que tiene de años. Por ejemplo si el niño tiene 5 años quedara en la silla durante 5 minutos. Parece poco, para un adulto, pero para un niño de 5 años quien es obligado a hacer nada, es mucho.
La segunda forma es limitando el acceso que tiene el niño a un bien no básico. A entenderse por bien básico, alimento, techo, calor, agua, cariño. El cariño para un niño es un bien básico. Solo en ciertas circunstancias el castigo puede ser quitar el cariño. Pero al igual que limitar la libertad es durante un espacio de tiempo muy corto. Limitar, entonces el acceso a sus juguetes, actividades deportivas favoritas, algo por el cual el niño "sufrirá" las consecuencias de sus actos. Aquí­ igual que en cualquier otra situación la firmeza, constancia y cohesión de los padres es fundamental. No puede el padre castigar a una semana sin el programa favorito de televisión, y después de dos días remitir este castigo. Una reducción de la "pena" solo puede ser entrevista si el niño presenta un comportamiento ejemplar.
La tercera forma es la reparación de la falta. Si el niño pega, que pida perdón, si el niño dibuja en las paredes que lo limpie, si el niño roba que lo pague. O sea su acción será de reparación de la falta que cometió. Claramente tiene que ser algo que el niño puede hacer. Si el niño rompe el televisor no le podemos pedir que lo repare ni que lo pague. No olvidar el premio. Al portarse bien y conforme con las normas sociales deseables, no hay que olvidar premiar al niño. Si ordeno los juguetes darle las gracias, si no lloro al entrar al colegio, felicitarlo. Muchas veces el premio es sumamente barato. Generalmente es solo un beso o una palabra de felicitación. Los dulces u otros alimentos son frecuentemente utilizados como recompensa. Al igual que el castigo fí­sico, una vez consumido no queda nada. Poder satisfacer o hacer feliz a alguien no tiene duración límite. Por lo demás, si la rutina comienza con un dulce, luego entenderá el niño y tendremos que comparar muchos dulces, con todos los problemas de salud que aquello conlleva.
Una buena forma para concretar el premio son los cuadros de comportamiento diario. Una tabla con los días de la semana, donde anotados están las tareas del niño. Al completar el d­ía de la forma deseada el niño puede elegir un "sticker" y pegarlo en su tabla.
Pero lo más fácil, barato, y duradero siempre será el amor, la admiración y el apoyo que le puede entregar la familia. Un "que bien Juan, te portaste muy bien." es sumamente apreciado por los niños.